Regenta la pastelería “La Tartarina“ desde 2015, cuando decide emprender por cuenta propia para dedicarse en plenitud a lo que, después de su familia, le hace más feliz. Tal es su pasión por esta profesión que, tras su paso por la escuela Hofmann,
su formación es constante y continua en su vida.
Nadia es la encargada de la producción y decoración de los dulces y tartas que “La Tartarina” ofrece, por lo que siempre encontrarás en ellos el sabor del cariño, la pasión, el entusiasmo y esmero con el que han sido elaborados, y siempre, eso sí... al ritmo de las mejores melodías!.
Permanentemente afanada en brindar dulces de gustosos sabores, agradables texturas y sorprendentes diseños.
Es detallista, muy exigente en el trabajo y de buen trato con la gente, por ello, si te acercas a su pastelería te atenderá de muy buena gana.